La situación en Gaza es cada vez más dramática, el brutal ataque que
esta sufriendo la población civil, que ya ha causado más de 230
muertos y casi dos mil heridos, en un ejercicio de inhumanidad y
racismo, por parte del estado de Israel. La CGT, que en sus
acuerdos de Congreso, tiene aprobada la solidaridad con la lucha por
sus justos derechos del pueblo Palestino, debe estar en estos
momentos junto con los colectivos de apoyo al Pueblo Palestino en
todas las acciones de protesta que se están convocando desde
diversas Plataformas.
Las bombas que lanzan contra la Franja de Gaza
han asesinado ya a más de 260 personas y han herido a más de 1700, la
mayoría niños. También han sido asesinados al menos 30 menores de edad.
Las noticias que nos llegan sobre los crímenes contra la humanidad del
ejército y el gobierno israelí nos hablan de simples números, intentando
quitarle importancia a la nueva barbaridad de los fascistas de Israel.
Sin embargo, las víctimas de Israel, con la complicidad de la comunidad
internacional, incluyendo los paises que van por el mundo de
antimperialistas, como Rusia, China, Brasil,
etc..., tienen todos nombres, son personas con historia, sentimientos,
planes, familias y que han crecido sufriendo desde su primer día de
existencia el salvaje régimen de apartheid impuesto por el gobierno de
Tel Aviv.
Por ello, se han publicado todos los nombres de las víctimas asesinadas
por Israel desde el comienzo de la nueva matanza en la campaña Nobody should be a number: Names of those killed in Gaza,
para recordarnos que nadie debería ser solamente un número, y que todos
los crímenes de los asesinos israelís tienen un nombre y, tenían, por
supuesto, una vida por delante.
Los ataques aéreos, los bombardeos con tanques, las municiones de guerra, las balas de goma, las granadas de aturdimiento, el gas lacrimógeno y las palizas que utilizan las fuerzas israelíes han causado heridas a otros centenares de civiles. Muchos se hallan en estado de gravedad. Los niños, que en Gaza constituyen más de la mitad de la población, están sufriendo de manera desproporcionada y, en forma similar a lo que ocurrió en medio de la barbarie militar de diciembre de 2008 a enero de 2009 y noviembre de 2012, se cuentan entre las numerosas víctimas. Agravando los traumas, las familias también siguen soportando múltiples tragedias, y algunas de ellas se ven actualmente diezmadas por los ataques israelíes.
Basta ya de derramamiento de sangre del pueblo palestino, basta ya de su opresión bajo la ocupación israelí, basta ya de injusticia y basta ya de violencia y de conflicto, que está infligiendo tanto sufrimiento a personas inocentes de ambas partes y está socavando la paz y la estabilidad regionales e internacionales.
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